En todas las cafeterías que he visitado aquí se vende chocolate a la taza. Esto término, sin embargo, no refiere a la bebida del invierno en los EEUU que consiste en polvo de chocolate que se mezcla con agua o leche caliente, sino literalmente a puro chocolate fundido que se pone en una taza para beber o añadir a churros si quieres. De verdad se vende el primer tipo también, pero tiene un nombre distinto aquí.